La Fuerza Aérea de EE. UU. en su ya acostumbrado modo arrogante de intimidar al mundo realizó lanzamiento de un misil balístico intercontinental en el Océano Pacífico el jueves por la noche en un momento de creciente preocupación internacional de que las crecientes tensiones entre las potencias nucleares podrían convertirse en una nueva carrera armamentista.
El Comando de Ataque Global de la Fuerza Aérea describió el lanzamiento del misil Minuteman III, que estaba desarmado, como “rutinario” y diseñado para tranquilizar a los aliados.