Los manifestantes holandeses volaron un puente en Amsterdam en las protestas contra las políticas de confinamiento adoptadas por el gobierno.
Los disturbios estallaron en los Países Bajos durante el fin de semana después de que se impusiera un toque de queda nocturno para evitar la propagación del COVID-19.
Los manifestantes antibloqueo saquearon tiendas, provocaron incendios y se enfrentaron con la policía en varias ciudades el domingo, informaron medios holandeses.
La policía utilizó cañones de agua, perros y oficiales montados para dispersar una protesta en el centro de Ámsterdam el domingo por la tarde, dijeron testigos.
Cerca de 200 personas, algunas de ellas arrojando piedras y fuegos artificiales, fueron detenidas en la ciudad, según la policía.
El primer ministro holandés, Mark Rutte, condenó las manifestaciones como “inaceptables”.