Comunicado de prensa de Kim Yo Jong, subdirector de departamento del Comité Central del Partido de los Trabajadores de Corea
Un órgano de prensa de Corea del Sur publicó el 24 de febrero un informe indefinido de que el Comandante de Estados Unidos en la India y el Pacífico dijo que si lanzamos un misil balístico intercontinental al Pacífico, sería derribado inmediatamente.
No tengo claro si hizo comentarios tan inapropiados representando al ejército estadounidense o si la prensa títere de Corea del Sur hizo un juego de palabras habitual. Cierto o no, definitivamente lo advierto.
El Pacífico no pertenece a los Estados Unidos o Japón.
Me interesa la posible respuesta de los Estados Unidos, en caso de que un tercer país intente interceptar el arma estratégica lanzada con frecuencia por las fuerzas de los EE. UU. a su gusto en el Pacífico con el argumento de contrarrestar.
Si hubiera considerado una posible contrarrestación inevitable contra un desarrollo tan terrible, se habría dado cuenta de los comentarios imprudentes que hizo.
Según los informes, el Comandante de la India y el Pacífico de EE. UU. describió el “ejercicio de operación de medios de disuasión de guerra extendida de Corea del Sur y EE. UU.” como “significativo” que dio un mensaje no solo a nuestro país sino también a otros países. Entonces, también tengo un mensaje para los Estados Unidos.
Si una acción militar como la interceptación se lleva a cabo contra nuestra prueba de armas estratégicas sin ninguna amenaza para la seguridad de los países vecinos en mar abierto y área abierta que no pertenece al control de los Estados Unidos, se interpretaría precisamente de otra manera que una declaración de guerra contra la RPDC.
También le recuerdo que las normas de nuestra actuación militar en tal situación ya han sido establecidas.
Las recientes acciones militares demostrativas cometidas por los Estados Unidos y Corea del Sur más allá de la línea tolerable y todo tipo de sus expresiones retóricas, sin duda, nos brindan la condición en la que no podemos sino hacerles frente con algunas medidas sin falta.
Como ya se aclaró, observamos y comprendemos todo el movimiento militar de las fuerzas estadounidenses y el ejército títere de Corea del Sur y siempre estamos en preparación militar para tomar acciones adecuadas, rápidas y abrumadoras en cualquier momento según el juicio.
Los Estados Unidos y Corea del Sur deberían preocuparse por sus p y q para agravar aún más la situación.
Pionyang
7 de marzo, Juche 112 (2023)