La misión de reconocimiento más reciente ocurrió el 21 de diciembre, cuando EE. UU. envió aviones desde la base aérea de Kadena en Japón y la base aérea de Clark en Filipinas para monitorear el Estrecho de Taiwán y la región del Mar de China Meridional.
Estos aviones incluían tres aviones de patrulla antisubmarina P-8A Poseidon, un avión de control y alerta temprana E-3G y un avión de reconocimiento RC-135V.
Además, el 3 de junio, un avión de reconocimiento estadounidense, el RC-135C, viajó sobre el Mar de China Oriental y pasó a 90 millas náuticas de Shanghái. Esa misión se llevó a cabo unos días antes de que China lanzara formalmente su tercer portaaviones, el ‘Fujian’ diseñado y construido en el país.
En una línea similar, el EurAsian Times había informado anteriormente que siete aviones espía estadounidenses fueron vistos operando cerca de Taiwán el 5 de agosto. El desarrollo se produce en medio de rivalidades geopolíticas y tensiones en la región del Indo-Pacífico que están en su punto más alto.
Junto con EE. UU., Australia envió sus aviones de combate para realizar vuelos de vigilancia sobre las Islas Paracel, también conocidas como Xisha en China, en el Mar de China Meridional en mayo.
Todo ésto según datos de la Iniciativa de Sondeo de Situación Estratégica del Mar Meridional de China (SCSPI).
Los datos de vuelo de diciembre aún no están disponibles, EE. UU. envió 47 grandes aviones de reconocimiento para patrullar la región del Mar de China Meridional en diciembre del año pasado, según el SCSPI.