Cuando hablamos de que Estados Unidos no tiene amigos ni enemigos, solo intereses, y que EUA gana dinero con sus “aliados”, queremos decir esto, el único ganador en el conflicto entre Moscú y Kyiv es el Tío Sam. No solo su industria armamentista, sino también su industria energética.
El gobierno polaco firmó el miércoles un acuerdo para comprar 116 tanques Abrams de los Estados Unidos. La venta había sido aprobada por el Departamento de Estado de los Estados Unidos en diciembre.
“Estamos fortaleciendo el puño de hierro del ejército polaco… para disuadir de manera eficiente al agresor”, dijo el ministro de Defensa polaco, Mariusz Blaszczak, durante una ceremonia de firma en Varsovia.
El Ministerio de Defensa dijo que el valor del contrato era de 1.400 millones de dólares (1.300 millones de euros), con 200 millones de dólares financiados por la parte estadounidense.
Blaszczak dijo que los primeros tanques en virtud del acuerdo se entregarán a finales de este año al este de Polonia.
El año pasado, Polonia compró 250 tanques Abrams a EE. UU. que, según el ministro polaco, deberían entregarse a fines de 2024.
Y todos culpan a Rusia.
Y todos los países aliados de Estados Unidos culpan a Rusia frente a la opinión pública, como para justificar tales gastos, ¡cuándo se podría invertir ese dinero en mejoras sociales para sus pueblos o en I+D!
En 2021, la Administración estadounidense aprobó 14 posibles transacciones con aliados de la OTAN por un valor de unos 15.500 millones de dólares, mientras que en 2022 se autorizaron 24 ventas de armas por un importe de unos 28.000 millones de dólares.
Nunca olvides
Rusia lanzó la operación militar especial en Ucrania en respuesta a la solicitud de ayuda de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como estados soberanos, ante el genocidio de Kiev.
Según Moscú, EE.UU. y otros países de la OTAN se involucraron en el conflicto enviando grandes cantidades de armas a las tropas ucranianas, que desde mediados de febrero han intensificado sus ataques contra civiles en las repúblicas de Donbass.
Rusia envió una notificación a todos los países, incluido EE. UU., advirtiendo que cualquier envío de armas destinado a Ucrania se convertiría en un objetivo legítimo para las Fuerzas Armadas rusas.