Hasta Guaido sin ningún resquicio a duda le dieron la espalda a Trump,Cría cuervos y te sacarán los ojos , una demostración de lo que es la política, y el único de Latinoamérica bien o mal algúna relación con Trump que no se ha manifestado sobre las elecciones presidenciales de Estados Unidos un comunista.
Juan Guaido Venezuela:
Cómo era:
Como es:
https://youtu.be/jLJyxge15V0
Ivan Duque Colombia
Como era:
Como es:
Felicitamos a @JoeBiden, nuevo Presidente de EE.UU y @kamalaharris, primera mujer vicepresidenta de EE.UU. Les deseamos los mejores éxitos en su gestión. Trabajaremos juntos en fortalecer la agenda común en comercio, medioambiente, seguridad y lucha contra crimen trasnacional.
— Iván Duque 🇨🇴 (@IvanDuque) November 7, 2020
Esto por nombrar algunos de sus aliados en la guerra que tienen contra Venezuela, lo malo es que por …no se…al menos esperar que sea oficial dar sus felicitaciones …y dar el privilegio de la duda a su coleguita …digo yo, ya que iban de compis por el mundo en la lucha contra Venezuela y cada paso que dieron lo hicieron bajo su mando.
Y cómo es la vida los únicos que no ha dado su opinión en la región suramericana y esperarán que sea oficial es los que etiquetan como comunista AMLO de México. Otros líderes como Vladimir Putin (Rusia),Miguel Días Canel (Cuba) Daniel Ortega (Nicaragua) como sabéis tienen sus problemas con el gobierno de Donald Trump.
Al aún presidente de los Estados Unidos el final del recuento electoral le pilló este sábado jugando al golf en el club de campo que tiene en Sterling (Virginia). Es dudoso que recibiera grandes dosis de apoyo porque se trata de un estado que no estuvo de su parte cuando tocó el cielo en 2016 y que tampoco lo ha estado ahora. Aunque no parece que Donald Trump necesite demasiado consuelo porque reaccionó asegurando que las elecciones norteamericanas están «lejos de haber terminado», y prometió una feroz batalla judicial tras volver a extender las dudas sobre la legitimidad del proceso electoral estadounidense sin, nuevamente.
Trump parece dispuesto a romper la tradición y a no facilitar un traspaso de poderes modélico. Abandonará la Casa Blanca en enero, pero va a ser plantando batalla más allá de las urnas. Una estrategia que, en todo caso, no pilla a nadie por sorpresa porque el líder republicano la viene anunciando desde que el martes se abrieran los centros de votación. Trump ha sembrado el camino con la habitual retórica incendiaria que ha marcado su mandato.
La oficina de prensa del aún presidente estadounidense emitió este sábado un comunicado en el que no reconocía la victoria de Biden. El texto aseguraba que el candidato demócrata se había «apresurado» a levantar los brazos y reclamar «falsamente» el triunfo cuando, según el líder republicano, el recuento de papeletas debe ser revisado aún en profundidad. «Los votos legales son los que deciden, no los medios de comunicación», insistió Trump, que también va a mantener su enfrentamiento con las principales empresas periodísticas del país hasta el final.
El equipo jurídico republicano ha puesto en duda todos los recuentos en los que Biden se ha impuesto por entre 0,5 y 1 punto de diferencia. Pero la realidad es que ningún recurso ha logrado por el momento voltear el recuento a favor de Trump. La única victoria jurídica es menor. La Corte de la Mancomunidad del estado de Pensilvania instó a que los interventores demócratas pudieran seguir más de cerca el conteo. La «novedad» ralentizó el proceso… pero poco más. Biden ha ganado en el estado con el 49,6% de los apoyos y una diferencia de 14.000 votos.
«No descansaré hasta que el pueblo americano tenga el recuento que se merece», insistió este sábado Trump tras la victoria de Biden. El líder republicano apelará ahora a la Corte Suprema, en la que los jueces conservadores tienen mayoría. Tres de los seis han sido incluso nombrados por el propio Trump durante su mandato, pero nada de eso garantiza que el recuento pudiera sufrir un vuelco. Principalmente, porque no están claras las irregularidades que reclaman los republicanos y tampoco han puesto sobre la mesa indicios de fraude reales.
La siguiente duda es si Trump aceptaría un fallo judicial desfavorable que debería suponer el final del camino… o no. Fuentes cercanas al presidente aseguran que ya empieza a prepararse para volver a aspirar a la presidencia en 2024.